Cuando todos los cerebros trabajan juntos… así sí se impulsa el negocio.
Reúne a producción, marketing, ventas, atención al cliente, finanzas… y descubre juntos las rutas reales de crecimiento que estaban ocultas.
Hace unos meses, en una empresa mediana, cada departamento funcionaba como podía.
Producción necesitaba formación en nuevas herramientas, pero RRHH no lo sabía.
Marketing hacía campañas genéricas.
Ventas se quejaba de que no servían.
Atención al cliente tenía ideas buenísimas… pero nadie las escuchaba.
El CEO quería lanzar un nuevo producto, pero entre tantas piezas sueltas, parecía más fácil no mover nada.
Entonces hicimos un Discovery.
Juntamos a todos los responsables de área en una sala, con la única consigna de hablar claro y construir soluciones juntos.
En unas horas:
-
Se identificaron los 3 bloqueos reales del negocio.
-
Surgieron soluciones prácticas desde dentro del equipo.
-
Se trazó un plan claro con responsables, fechas y acciones.
Pero aquí está el verdadero valor: No fue una tormenta de ideas sin rumbo.
Fue un proceso guiado por alguien que ya ha estado ahí.
Con más de 20 años ayudando a empresas tradicionales a transformarse, sé detectar oportunidades donde otros sólo ven problemas.
Sé lo que están haciendo otros sectores que podría funcionar en el tuyo.
Sé qué herramientas digitales pueden liberarte tiempo y recursos.
Sé cómo convertir ideas sueltas en una estrategia realista.
El Discovery no es un taller.
No es una charla motivacional.
Es una sesión estratégica con visión externa, ideas internas y un resultado concreto: un plan para que tu empresa avance.
Y si hace falta, mi equipo y yo te acompañamos después para hacerlo realidad.
Qué puedes obtener a partir de esta sesión:
➤ Todas las áreas de tu empresa, en una sola conversación.
➤ El mapa real de cómo funciona (y falla) tu negocio.
➤ Qué hace falta cambiar… y qué hace falta dejar de hacer.
➤ Nuevas ideas, desde dentro. Lo que ve tu equipo que tú no.
➤ Visión externa: detectamos lo que tú ya no ves dentro.
➤ Ideas de otros sectores, adaptadas a tu realidad para crecer más rápido.
➤ Beneficio real para cada área, no sólo “mejoras genéricas”.
➤ De la charla al plan: objetivos concretos, calendario y responsables.
¿Notas que tu empresa tiene potencial, pero no termina de arrancar?
¿Estás a punto de lanzar algo nuevo, entrar en un mercado desconocido o integrar una adquisición?
Discovery es el primer paso real hacia ese cambio.
Un día con tu equipo. Con foco. Con preguntas incómodas. Con respuestas útiles.
Y con un plan para salir del bloqueo.
Preguntas frecuentes
¿A quién va dirigido Discovery?
A empresas que quieren crecer, lanzar algo nuevo o reestructurarse sin caos. Lo usamos para planes de negocio, nuevas líneas, fusiones o cambios profundos.
¿Quién participa?
Responsables de cada área: producción, ventas, marketing, atención al cliente, finanzas, RRHH. No importa el tamaño, importa que todos tengan algo que aportar.
¿Qué puedo aportar con mi equipo?
La experiencia de haber transformado decenas de negocios reales. Detectamos lo que frena, proponemos lo que otros sectores ya están haciendo bien, y facilitamos un plan ejecutable.
¿Cuánto dura?
Una jornada intensiva de 6‑8 horas. Es una sesión presencial, y si necesitas ayuda después, también te acompañamos en la ejecución. Yo estoy en Madrid, pero me desplazo a cualquier ciudad de España.
¿Qué te llevarás?
Una radiografía clara, una lista de acciones, responsables, fechas… y lo más importante: un equipo alineado y comprometido en la misma dirección.
“Un pesimista ve la dificultad en cada oportunidad; un optimista ve la oportunidad en cada dificultad.”
Esta frase de Winston S. Churchill, ha sido aplicada en la vida empresarial muchas veces...debemos ser optimistas y usar los recursos que tenemos en nuestro equipo para que de manera conjunta logremos el cambio y los objetivos que queremos alcanzar.
Hay cuatro reglas básicas:
1. No juzgar.
Eliminamos las críticas. Cuando surgen ideas, no se permite ningún comentario negativo. Todas las ideas se anotan y son bienvenidas.
2. Piensa libremente.
La libertad de expresión es muy importante. Los pensamientos descabellados están bien. Las ideas imposibles o inimaginables están bien. De hecho, en cada sesión debe haber alguna idea lo suficientemente loca como para hacer reír a todo el grupo.
3. La cantidad es importante.
Hay que concentrarse en generar un gran número de ideas que luego puedan ser revisadas. Cuanto mayor sea el número de ideas, más fácil será elegir entre ellas.
4. El efecto multiplicador.
Se busca la combinación de ideas y sus mejoras. Además de aportar sus propias ideas, los participantes pueden sugerir mejoras a las ideas de otras personas o conseguir una idea mejor de la combinación de otras dos.